HUELGA - REIVINDICANDO EL DERECHO DE HUELGA - Por DR. LUIS RAMIREZ --- REGRESIÓN HISTÓRICA --- REPLANTEO NEO-LIBERAL --- TRABAJO ESCLAVO E INHUMANO --- TAZA DE GANANCIA --- PÉRDIDA DE PODER --- FLEXIBILIDAD LABORAL --- DESPOJO A LOS TRABAJADORES --- REFORMA LABORAL --- SIN PATRONES Y SIN DERECHOS --- LUCHA POR LOS DERECHOS Y DIGNIDAD DEL TRABAJADOR

REIVINDICANDO EL DERECHO DE HUELGA
Por DR. LUIS RAMIREZ

(A propósito de la “huelga salvaje” de los aeronáuticos)

Observando el fenómeno social de la proliferación de trabajadores pedaleando con las cajas de Glovo, Rappi o Pedidos Ya, recientemente reflexionaba sobre lo curioso de este sistema capitalista que, de tanto avanzar, parece estar regresando al punto de partida, en un recorrido de 360º. 

En efecto, los libros de historia nos cuentan sobre las condiciones inhumanas de vida y de labor de los trabajadores en los albores del capitalismo; sobre las luchas obreras para destruirlo, y sobre las “concesiones” que las clases dominantes ofrecieron para neutralizarlas; nos informan sobre las conquistas de derechos y avances sociales que se alcanzan hasta mediados de la década del ´70 del siglo pasado, cuando aparece lo que hemos llamado “neoliberalismo”, que se replantea, precisamente, esos derechos y conquistas, no sólo por visualizarlos como una reducción de la tasa de ganancias del capital, sino, fundamentalmente, como una pérdida de poder.

La primera etapa de este período se caracterizó por un retroceso sutil y por un lento pero progresivo despojo a los trabajadores. 

Con cierto pudor o vergüenza: no había que eliminar derechos, sólo “flexibilizarlos”, y la mayor explotación de la mano de obra que se pretendía era presentada como una simple “reforma laboral”. 

Pero ahora parece que ya no hace falta tamaña hipocresía: frente a nuestros ojos se desarrolla con absoluta impunidad el drama de miles de trabajadores, a los que les vendieron que son afortunados porque no tienen patrones; claro que tampoco tienen derechos. 

Deben dejar la vida pedaleando (literalmente), para juntar unos pocos pesos. La verdad, no veo mucha diferencia con aquellos trabajadores súper explotados de principios del siglo XX.

Y en esta sociedad, cada vez más materialista, insolidaria, desigual e injusta, la huelga y el conflicto colectivo son, cada vez más, la única defensa de los trabajadores y la única garantía de real de progreso social, pese a los esfuerzos del discurso oficial y de la prensa canalla para des-legitimarlos, especialmente si afecta algún servicio público y a algún sector de la comunidad. Con una apelación constante a la racionalidad y a una supuesta “toma de rehenes” de los usuarios, lo que se busca es, en realidad, despojar a esos trabajadores de la única herramienta que disponen para luchar por sus derechos y por su dignidad. Así de simple.