Buscar este blog

miércoles, 4 de julio de 2018

ERNEST HEMINGWAY - EL VIEJO Y EL MAR --- VALORES Y SABIDURIA DE LOS VIEJOS --- FUERZA ESPIRITUAL --- SER ÚTIL --- LUCHA POR TERMINAR EL OBJETIVO MARCADO --- LA VIDA COMO LUCHA CONSTANTE --- LOS VALORES COMO PARTE VITAL DE LA PERSONA --- VALORES SOCIALES ELEMENTALES --- LA PERSEVERANCIA --- PRACTICA DE LA SOLIDARIDAD --- VALORES COMUNES DE LA SOCIEDAD --- SENTIDO DE PERTENENCIA --- RESPETO --- HOMBRE DE PROVECHO --- HUMILDAD --- DERROTA --- SENTIDO ÉPICO --- RESPETO A LA NATURALEZA

Resultado de imagen para ernest hemingway fotos


LOS VALORES EN LA OBRA “EL VIEJO Y EL MAR”

El libro “el viejo y el mar” expone en cada una de sus páginas la historia de un octogenario que no había tenido suerte con la pesca durante ochenta y cuatro días, y aunque era excelente en este oficio, la naturaleza se había convertido en su enemigo más difícil de vencer. 

Su fiel seguidor, Manolín un joven, le daba su apoyo y su amistad incondicional en su trabajo diario; aunque luego de mucho sacrificio él logró conseguir su anhelado gran pez, simplemente lo perdió. 

En esta obra maestra de Ernest Hemingway, él ha logrado destacar muchos valores que los viejos poseen y ha hecho a un lado el falso concepto de que los ancianos ya no son provechosos e incluso ha enaltecido la gran sabiduría y la fuerza espiritual que poseen. 

Ramón nos explica que : Ser útil y ser anciano no deben ser conceptos antagonistas, el respeto y cariño del joven por el viejo y la lucha por terminar el objetivo marcado, son las tres lecciones que nos deja Hemingway;  también el autor ha logrado demostrar que la vida es una lucha constante, a la cual se debe afrontar con valor aunque a veces la derrota sea irremediable. 

Los valores son parte vital de las personas y cualidades como: el respeto, la solidaridad y esencialmente la perseverancia son las características principales que rodean al protagonista y al resto de personajes que interactúan en la historia, demostrando así un paradigma de lo que los seres humanos deberíamos ser.

En esta ilustre obra, Ernest Hemingway ha logrado resaltar muchos valores que son elementales para el buen funcionamiento de una sociedad común; a través de cada argumento se describe a un hombre viejo que vive solo, rodeado por el mar a la espera de conseguir un gran pez que le reporte beneficios a él y a los de su comunidad. 

Siempre con esperanza. En su soledad, el viejo medita, mientras se rodea de pequeños momentos que le brinda su entorno. 

Su respeto y amor por la naturaleza es un homenaje que rinde Hemingway al lugar donde fue inspirada esta novela. 

También el viejo nos demuestra a los lectores que, la perseverancia en la lucha es vital y aunque muchas veces el destino no nos trae muy buenas experiencias, se debe recordar que siempre habrá una recompensa por todos nuestros esfuerzos. 

A través de las palabras de un diálogo sencillo pero muy sustancial, se logra además destacar muchos otros valores y virtudes que rodean al anciano y al muchacho.

Historia basada en hechos de la vida real, el escritor ha puesto en su libro una experiencia personal para poder realizar su más impresionante novela. 

Gregorio Fuentes nos relata como la novela fue inspirada: 

“—Un día salimos en el Pilar muy temprano, rumbo al puerto de La Habana. Íbamos sólo Hemingway y yo. Como de costumbre, iba leyendo. Siempre tenía un libro a mano. Y una libreta de apuntes. Habríamos recorrido unas 10 millas, más o menos, cuando vimos una pequeña barca en el horizonte. Entonces me ordenó que pusiera rumbo hacia ella, por si necesitaban algo. —En la barca había dos personas, un viejo y un niño. 

Tanto a Hemingway como a mí nos asombró que no tuviesen víveres ni agua, estando tantas millas mar adentro. Acerqué el Pilar lo más que pude y luego de saludar, les preguntamos si necesitaban ayuda. ¿Y saben lo que hizo el viejo? ¡Se puso a chillar e insultarnos, diciendo que nos fuésemos al diablo, que espantábamos la pesca! “Papá” y yo nos miramos asombrados. 

Él igual me hizo preparar una cesta con algo de comida, galletas y cerveza fría. Até un cordel a la cesta y se la bajé al niño, que nos miraba asustado. Sin cruzar ni una palabra más, nos alejamos de allí. 

“Papá” enseguida comenzó a escribir en su libreta y luego me pidió encarecidamente que intentase ubicar al viejo o al niño. Que les buscase por todos los puertos de pescadores de esa costa. Eso fue allá por los años 40 y a pesar de múltiples intentos, nunca les pude encontrar. Pero se ve que a “Papá” ese incidente y el orgullo de aquel pobre viejo le impresionaron muchísimo, porque años más tarde escribió El viejo y el mar. Su novela sobre la gente humilde de Cuba. Ese es el verdadero origen de la historia...”

La práctica de la solidaridad, en un grupo social es la capacidad de actuación unitaria de sus miembros. Este valor manifiesta un alto grado de integración y estabilidad interna. 

La solidaridad, muy habitual en las sociedades tradicionales, se produce como consecuencia del apego a valores comunes, que lleva a compartir creencias relacionadas con los aspectos fundamentales de los grupos sociales. 

Son elementos activos de la solidaridad: una actuación mutua que a los valores personales antepone las normas, intereses y valores de la comunidad; el sentido de pertenencia es poco valorado en la actuación de un hombre solidario; el viejo y el mar señala la practica de este valor imprescindible, en la relación del muchacho y el viejo e igualmente como ellos, todos deberíamos ser solidarios en nuestra comunidad, para así realizar un cambio social y desaparecer esa idea de autoengrandecimiento y egoísmo.

El respeto, es la veneración o admiración que se hace a alguien. El  muchacho nos expresa  por medio de sus actos que no importa la persona que sea, siempre debemos mantener el respeto, aunque sea un desconocido, un familiar, un amigo, etc. 

Manolín el joven hombre aprende rápidamente a ser una persona de provecho; además tiene como guía y buen consejero, al viejo, que con sus años de experiencia ha sabido reflejar en él los buenos valores, he incluso la enseñanza correcta de cómo ser un buen pescador y también de lo que es un verdadero amigo y cuan valiosa es la amistad en la vida. 

Aparte se demuestra en la novela que ser humilde no es un signo de fragilidad, sino que, una persona debe aprender a tener conocimiento de sus propias limitaciones y debilidades y en obrar de acuerdo con este conocimiento, esto implica que también es conveniente aprender ha hablar solo lo que se debe y no derrochar innecesariamente nuestras palabras. 

El autor al final de su interesante historia, nos habla de una derrota y aunque el anciano se siente demacrado por lo sucedido, sabe aceptar lo que le tocó. 

Cuando aceptamos nuestro destino, la resignación también debe formar parte de nosotros. Esto es lo que le ocurre a Santiago. 

No se da nunca por vencido, pero, a pesar de su valeroso esfuerzo, el viejo acepta con entereza su destino y la ley que imponen las fuerzas de la naturaleza. 

Por ello, no se siente derrotado, porque como nos dice Hemingway: “el hombre no está hecho para la derrota; un hombre puede ser destruido, pero no derrotado”.

 El viejo y el mar no solo es una excelente obra literaria, sino que es un portal hacia una visión realista de lo que la sociedad debería poseer y con esto hago referencia a los principios y valores rescatados en cada página que constituye este libro escrito por Ernest Hemingway. 

Como explica Alicia Perdomo Hernández: “la novela que se agrupa dentro de las más relevantes de la literatura norteamericana y que, además, está llena de sentido épico; refleja la sencillez y la poderosa fuerza expresiva de la oralidad, muy con el estilo del escritor”. 

Entre muchas de las ideas introducidas por el autor se sobresalta el respeto, valor importante y característico de los dos protagonistas y hacia la naturaleza,  representado por el amor que el viejo manifiesta a todos los seres vivos que la constituyen. 

La práctica de solidaridad se ve mucho en la ayuda desinteresada que el muchacho presta al viejo; también se dialoga sobre la soledad medio por el cual la meditación y la sabiduría se hacen parte de las particularidades del viejo, influye también la amistad y lo importante que es en las relaciones humanas; para el final, el libro nos relata la derrota y que es importante saber aprender a aceptarla, ser humildes y no dejar que esta obtenga la victoria sobre nosotros, sino que el positivismo y la esperanza deben liderar nuestro pensamiento para así poder realmente triunfar.

BIOGRAFÍA DEL AUTOR
 ERNEST HEMINGWAY

Novelista estadounidense cuyo estilo se caracteriza por los diálogos nítidos y lacónicos y por la descripción emocional sugerida. 

Su vida y su obra ejercieron una gran influencia en los escritores estadounidenses de la época. 

Muchas de sus obras están consideradas como clásicos de la literatura en lengua inglesa. 

Hemingway nació el 21 de julio de 1899 en Oak Park, Illinois, en cuyo instituto estudió. 

Trabajó como reportero del Kansas City Star, pero a los pocos meses se alistó como voluntario para conducir ambulancias en Italia durante la I Guerra Mundial. Más tarde fue transferido al ejército italiano resultando herido de gravedad. 

Después de la guerra fue corresponsal del Toronto Star hasta que se marchó a vivir a París, donde los escritores exiliados Ezra Pound y Gertrude Stein le animaron a escribir obras literarias. 

A partir de 1927 pasó largas temporadas en Key West, Florida, en España y en África. Volvió a España, durante la Guerra Civil, como corresponsal de guerra, cargo que también desempeñó en la II Guerra Mundial. Más tarde fue reportero del primer Ejército de Estados Unidos. Aunque no era soldado, participó en varias batallas. 

Después de la guerra, Hemingway se estableció en Cuba, cerca de La Habana, y en 1958 en Ketchum, Idaho. 

Hemingway utilizó sus experiencias de pescador, cazador y aficionado a las corridas de toros en sus obras. 

Su vida aventurera le llevó varias veces a las puertas de la muerte: en la Guerra Civil española cuando estallaron bombas en la habitación de su hotel, en la II Guerra Mundial al chocar con un taxi durante los apagones de guerra, y en 1954 cuando su avión se estrelló en África. 

Murió en Ketchum el 2 de julio de 1961, disparándose un tiro con una escopeta. 

Uno de los escritores más importantes entre las dos guerras mundiales, Hemingway describe en sus primeros libros la vida de dos tipos de personas. 

Por un lado, hombres y mujeres despojados por la II Guerra Mundial de su fe en los valores morales en los que antes creían, y que viven despreciando todo de forma cínica excepto sus propias necesidades afectivas. 

Y por otro, hombres de carácter simple y emociones primitivas, como los boxeadores profesionales y los toreros, de los que describe sus valientes y a menudo inútiles batallas contra las circunstancias. 

Entre sus primeras obras se encuentran los libros de cuentos Tres relatos y diez poemas (1923), su primer libro En nuestro tiempo (1924), relatos que reflejan su juventud, Hombres sin mujeres (1927), libro que incluía el cuento 'Los asesinos', notable por su descripción de una muerte inminente, y El que gana no se lleva nada (1933), libro de relatos en los que describe las desgracias de los europeos. 

La novela que le dio la fama, Fiesta (1926), narra la historia de un grupo de estadounidenses y británicos que vagan sin rumbo fijo por Francia y España, miembros de la llamada generación perdida del periodo posterior a la I Guerra Mundial. 

En 1929 publicó su segunda novela importante, Adiós a las armas, conmovedora historia de un amor entre un oficial estadounidense del servicio de ambulancias y una enfermera inglesa que se desarrolla en Italia durante la guerra. 

Siguieron Muerte en la tarde (1932), artículos sobre corridas de toros, y Las verdes colinas de Africa (1935), escritos sobre caza mayor. 

Hemingway había explorado temas como la impotencia y el fracaso, pero al final de la década de 1930 empezó a poner de manifiesto su preocupación por los problemas sociales. 

Tanto su novela Tener y no tener (1937) como su obra de teatro La quinta columna, publicada en La quinta columna y los primeros cincuenta y nueve relatos (1938), condenan duramente las injusticias políticas y económicas. 

Dos de sus mejores cuentos, 'La vida feliz de Francis Macomber' y 'Las nieves del Kilimanjaro', forman parte de este último libro. 

En la novela Por quién doblan las campanas (1940), basada en su experiencia durante la Guerra Civil española, intenta demostrar que la pérdida de libertad en cualquier parte del mundo es señal de que la libertad se encuentra en peligro en todas partes. Por el número de ejemplares vendidos, esta novela fue su obra de más éxito. 

Durante la década siguiente, sus únicos trabajos literarios fueron Hombres en guerra (1942), que él editó, y la novela Al otro lado del río y entre los árboles (1950). 

En 1952 Hemingway publicó El viejo y el mar, una novela corta, convincente y heroica sobre un viejo pescador cubano, por la que ganó el Premio Pulitzer de Literatura en 1953. 

En 1954 le fue concedido el Premio Nobel de Literatura. 

Su última obra publicada en vida fue Poemas completos(1960). Los libros que se publicaron póstumamente incluyen París era una fiesta (1964), un relato de sus primeros años en París y España, Enviado especial (1967), que reúne sus artículos y reportajes periodísticos, Primeros artículos (1970), la novela del mar Islas en el golfo (1970) y la inacabada El jardín del Edén (1986). Dejó sin publicar 3.000 páginas de manuscritos.

TOMADO DEL BLOG DE GStef16



Resultado de imagen para ernest hemingway el viejo y el mar fotos

No hay comentarios:

Publicar un comentario